¿Cómo se hace una gran canción? Es una gran pregunta, sobre la que se ha escrito muchísimo en un intento de desentrañar la «fórmula» para crear un disco de éxito que domine el mundo. Claro, hay algunas reglas básicas y si examinaras un puñado de las canciones más exitosas o populares de las últimas cuatro décadas, tienen ciertas cosas en común. Intro, verso, puente, coro, verso, puente, coro, octavo medio, coro, coro…

Resumen de contenidos

El enfoque atractivo de un éxito musical

Podemos examinar cosas como la estructura, la melodía y la producción muy fácilmente, pero para una mayor comprensión del «smash», tenemos que mirar los conceptos. ¿Alguna vez te has preguntado por qué algunas canciones parecen «conectar» con la gente y otras no? Cuando se pregunta por qué a la gente le gusta una canción, normalmente dicen algo como «me gusta la canción» o «tiene un gran ritmo». Muy raramente el consumidor medio de música, te dirá que le gusta una canción por la forma inteligente en que ha sido escrita. O porque la música suena como si fuera realmente difícil de tocar. La gente simplemente no está interesada en esas cosas. Se sienten impactados en la exquisita combinación de una gran melodía y una letra con la que se puedan relacionar, y preferiblemente cantar.

Por supuesto que esto no es cierto para todos los géneros musicales. Pero para los objetivos de este artículo, nos referimos principalmente a la música pop, ya que este género domina de sobre manera el ejemplo vivo de un single de éxito.

La tiranía de la música comercial

Sí, hay muchos músicos y compositores brillantes e inteligentes, cuya música nunca está ni siquiera cerca de la radio y probablemente nunca lo estará. Aunque la industria musical es en parte responsable de esto, no cambia el hecho de que (en general) si quieres tener una gran canción, tienes que ser capaz de conectar con mucha gente. Y eso significa entregar un mensaje que sea claro, simple, pegadizo y fácil de relacionarse.

Esto significa pensar con mucho cuidado sobre lo que la canción trata en realidad. Puede ser tan fácil involucrarse en los detalles de la música en sí, como por ejemplo qué acordes usar… ¿Cómo debería ser la melodía? ¿Cómo debería sonar el tambor de la caja? A veces el concepto central de la canción puede terminar como una idea improvisada del último momento.

La subjetividad personal del compositor

Como profesionales en el mundo del espectáculo en general y en el de la música en particular, escuchamos muchas demos de nuevos artistas. Algunos de los cuales se apresuran a decirnos con mucha confianza, cuáles de sus canciones son los singles, o «radio friendly». La mayoría de las veces, la canción que señalan es la que más han trabajado, o la canción con la letra sobre su ex-pareja. A veces esto puede significar que sus letras son tan personales para ellos, que corren el peligro de no significar nada para nadie más. Así que ayuda mucho si eres capaz de dar un paso atrás en tu trabajo y preguntarte: si nunca hubiera escuchado esta canción, ¿qué pensaría de ella? ¿Sé de qué se trata? Más importante aún, ¿me importa de qué trata?

El público objetivo de tus composiciones musicales

Veamos un par de ejemplos recientes de la canción de éxito. Lo ames o lo odies, «You’re Beautiful» de James Blunt fue sin duda una de las grandes canciones pop de 2005, lanzando una carrera multimillonaria de ventas en todo el mundo para el artista. Los cínicos señalarán que había un gran sello y un poderoso marketing detrás de él, lo cual también es cierto, pero estaban comercializando algo que ya iba a ser relativamente fácil de vender, debido a la simplicidad del concepto, la música y las letras. No creemos que sea demasiado irrazonable sugerir que sin esta canción, el nivel de su éxito no sería tan grande, y ciertamente no habría sucedido tan rápido.

El sentimiento detrás de la canción de Blunt es extremadamente simple. Tal vez por eso la gente se conecta con ella. Es esencialmente una canción de «la hierba es más verde», donde el protagonista imagina una relación con una persona extraña que acaba de encontrar. También es muy memorable, incluso desde la primera vez que la escuchaste. Puede que no te sepas toda la letra de los versos de inmediato, pero el coro es instantáneo. Nunca hay un momento en el que no estés seguro de la letra porque «no puedes oírla bien».

Ahora imagina la misma música, pero con letras cuidadas e ingeniosas que sólo tú entiendes. ¿Sigue teniendo la canción la misma capacidad de conectar con una gran audiencia? ¿O sólo contigo? ( Esto puede llevarnos a otra perspectiva – para quién escribes la música, ¡pero eso es otro tema en sí mismo! ) Ahora inténtalo al revés; toma la letra y cántala con una nueva melodía sobre unos complejos acordes en una inteligente firma de tiempo – ¿sigue siendo un éxito? No nos respondas, ya sabemos que es muy poco probable.

El gancho de la música comercial actual

Hay cientos de ejemplos en el repertorio de los grande éxitos de la música española e internacional, que están construidas sobre un ritmo contagioso y con muy pocos acordes.

En 2007, el tema Umbrella de Rihanna tuvo un impacto similar en el mundo del pop. La canción está construida sobre un ritmo contagioso y muy pocos acordes, y de nuevo hay un fuerte concepto detrás de esta canción. Si miras la letra, es más que otra cosa del tipo «Te quiero, nena», pero también tiene un gancho principal muy simple, que te golpea la primera vez que llegas a lo que muchos llaman el «pay off», el trozo de «ella – ella – ella – eh – eh – eh», ¡un momento pop moderno exagerantemente pegadizo!

¿La canción se mantendría en pie sin este gancho? Sí, creemos que sí, porque el truco suena como una adición al concepto, no al concepto en sí mismo. En otras palabras, «Umbrella» ya es fuerte sin él, pero como es un disco de pop, este gancho coloca al tema en otra división.

En otras palabras, es preciso considerar la importancia de plantear exactamente lo que estás diciendo en tus canciones. Normalmente no basta con tener un gran ritmo o un gran riff, ¡intenta pensar que estas cosas son el punto de partida!

Las canciones con buenas ideas

También es importante no confundir las ideas «simples» con las «tontas». Escribir letras de pop complicadas es relativamente fácil en comparación con escribir buenas letras de pop sencillas. Y los grandes letristas escribirán a varios niveles que te proporcionarán significados más profundos si quieres buscarlos. Esta es una habilidad que es más difícil de lo que parece y puede tomar mucho tiempo en desarrollarse.

Los primeros discos de Motown son un buen ejemplo de este tipo de cosas, en los que los escritores proporcionaban un significado «superficial» pegadizo que sonaba a gran música pop, pero debajo había a menudo otra motivación (a veces con connotaciones sociales o políticas) Smokey Robinson y Marvin Gaye estaban entre los que se interesaban por este tipo de escritura, y eran responsables de crear algunos éxitos pop básicos que eran accesibles para todo el mundo, pero que a menudo tenían una segunda «capa» de significado.

Así que no tienes que «tontear» tu obra maestra para transmitir tu mensaje, sólo intenta disfrazarla un poco, ¡le darás profundidad a tu trabajo y estarás en buena compañía!

Por supuesto, la parte más importante de centrarse en el concepto de tu canción es tener un concepto para empezar. ¿Qué es lo que la gente quiere oír? Los temas de amor y los desengaños amorosos son los más populares. En cambio, las anécdotas sobre la alimentación de tu gato no llamarán la atención de la gente de la misma manera. Si dedicas un poco de tiempo a considerar lo que realmente estás diciendo, y cómo la gente interpretará tu «mensaje», deberías ser capaz de dar a tu trabajo una mejor oportunidad de conectar con tu audiencia.

En lugar de pasar tres horas retocando el tambor de la caja, pasa tres horas haciendo de tu idea central, algo con lo que la gente pueda identificarse. Ya que generalmente la gente no escucha las canciones por el sonido de las baterías.